ALBÓNDIGAS DE LENTEJAS

Hola a todos :) ¡Hoy os traigo unas albóndigas de verduras y lentejas que están de muerte! Espero que os guste la receta y os sirva de ayuda :)

Ingredientes:

• 450g de champiñones picados (frescos o en lata)
• 1 cebolla picada finamente
• 4 ajos picados finamente
• 1 poco de perejil picado
• 1 chucharada de pimentón 
• 1 cucharada de salsa de soja
• 1/2 taza de avena integral molida
• 1 cucharada de lino picado
• 1 taza de lentejas cocidas
• 1 pizca de orégano

Preparación

1. Para hacer nuestras albóndigas de verduras y lentejas, empezaremos salteando nuestros champiñones (de lata o frescos) en una sartén, bien picados. Dejaremos que suelten toda el agua (la podéis ir retirando).
2. Cuando los champiñones ya se hayan reducido, vamos a agregar la cebolla bien picada y el ajo, también picado. Lo dejaremos cocinar unos 5 minutos más y le pondremos una cucharada de salsa de soja y 1 cucharada de pimentón.
3. Cuando ya esté todo dorado, apagaremos el fuego, incorporaremos el perejil y lo dejaremos reposar.
4. Ahora, en un recipiente a parte, pondremos las lentejas y las chafaremos hasta que queden como un puré. Incorporaremos después los champiñones, la avena molida, el orégano y las semillas de lino trituradas.
5. Finalmente, lo mezclaremos todo bien con las manos y haremos la forma de las albóndigas (da para unas 10-12 albóndigas). Las cocinaremos primero a la sartén y, cuando estén cocidas, las pondremos en la sartén donde estamos haciendo nuestra salsa de tomate durante 5 minutos, para que queden bien impregnadas. 

Podéis acompañarlas con fideos de calabacín o fideos integrales. 

Para la salsa de tomate: 

Cogéis 1kg de tomates y los trituráis, o bien cogéis una lata de tomate triturado natural (de 800g-1kg).

Lo ponéis en una sartén con un chorrito de aceite y lo dejáis que vaya cocinándose. Hay que ir removiendo bien. Le agregáis también sal, un poquito de azúcar para corregir la acidez y perejil.

También podrías, en una sartén a parte, dorar un poco de cebolla picada y ajo y agregarlo al tomate para que tenga más sabor. 

Lo dejáis cocinándose hasta que veáis que el tomate cambia de color. Si veis que se pega mucho, le podéis agregar un poquito de agua.