¿Quién ha dicho que solo puede prepararse a base de lechuga? Atrévete a enriquecerla para que sea un plato cinco estrellas.
Trucos del chef
Para preparar una ensalada perfecta tenemos primero que ver…
- Que no nos aburra
- Que nos aporte un buen número de nutrientes, esos que nuestro cuerpo necesita para funcionar a la perfección.
¿Quién no se harta de comer cada día ensaladas a base de lechuga, tomate y cebolla?
- Busca la variedad
Si incluyes en tus ensaladas verduras, frutas, legumbres o tofu, por ejemplo, les estarás dando, además, un plus inmejorable de nutrientes. A las vitaminas y minerales añadirás fibra y proteína. De este modo, un solo plato de ensalada te puede «regalar» el alimento que necesitan desde tus músculos hasta tus huesos, pasando por tu corazón.
- Elige bien los alimentos
Menos es más. Llenar el plato con innumerables ingredientes o con demasiada cantidad de uno de ellos puede destrozarlas, porque no podre- mos apreciar bien ningún sabor. Deja que los vegetales de hoja verde, las lechugas y los brotes tiernos (canónigos, rúcula y hasta espinacas) sean la base de tus ensaladas. Después, añade los secundarios: legumbres, cereales, verduras y hortalizas como la cebolla, el tomate, la zanahoria, el pepino y hasta el calabacín y la calabaza en láminas finísimas…
¿Lo más importante? Alimentos de proximidad y de temporada: tienen más sabor y nutrientes, mejor precio y nos permiten cuidar el planeta.
- Ingredientes veggie deliciosos
Las semillas: de lino, de chía, de calabaza, de girasol, de amapola o de sésamo, son perfectas en las ensaladas y aportan un plus de grasa saludable y fibra.
El miso: es un probiótico que mejora la flora intestinal. Su sabor salado realza los platos. Y combina perfectamente con la miel, salsa de soja o zumo de naranja.
Las algas: El alga wakame es perfecta para las ensaladas. Aporta vitaminas y minerales y tiene un sabor dulce. El alga nori nos aporta proteínas, pero debemos consumir pequeñas cantidades, porque es muy rica en yodo y puede perjudicar nuestra tiroides.
Los germinados: son los primeros brotes que nacen de las semillas y sus nutrientes permanecen intactos hasta el momento de con- sumirlos. Cuando los compres, procura consumirlos en uno o dos días.